Aunque muchas mujeres creen tener la piel sensible o sensitiva afortunadamente este no es el caso.

La piel sensible requiere cuidados especiales y es fácil saber si la tienes.

Hay quienes dicen que la piel sensible no es un tipo de piel sino un estado en el que la piel se vuelve reactiva.

Que es piel sensible
Este es un tipo de piel que se enrojece, irrita, pica, arde o inflama cuando se expone al sol, frío o calor, sustancias irritantes, algunos alimentos y hasta estrés.

La mayoría de las personas pueden sufrir de estos síntomas ocasionalmente pero son leves e infrecuentes, en la piel sensible son la reacción esperada casi todo el tiempo.

Hay un tipo de piel sensible llamado piel hipersensible que presenta las condiciones anteriores en forma extrema y causa dolor e incomodidad.

Esta piel requiere tratamiento médico.

Quien tiene piel sensible
Cualquier persona puede tenerla y en cualquier lugar pero es más común en climas fríos y personas de piel blanca.

Puede ser que la persona siempre tenga la piel sensible o que se ponga sensible a cierta edad (la edad varia) o que se torne sensible alguna vez.

En todos los casos los cuidados son los mismos.

Cuidados para la piel sensible
El primer paso es tratar de identificar qué factores irritan tu piel. Puede ser al comer ciertos alimentos como especies, alimentos picantes, alcohol, ciertas verduras como los tomates, berenjenas y ají de todo tipo etc.

Puede deberse al clima frío o muy caliente, el uso de algunos ingredientes en productos para la cara como retinol, ácidos como acido glicólico, acido salicílico etc., estrés, cuando se acerca el periodo entre otros.

Generalmente todo lo que causa la dilatación de los vasos sanguíneos puede irritar la piel. Por ejemplo bebidas calientes o la aplicación de agua caliente al rostro

Productos para la piel sensible
En la piel sensible es importante usar productos que no contengan irritantes. Por esta razón lo más sencillo es usar productos especiales para piel sensible o sensitiva

Al usar los productos hay que observar como reacciona la piel a los productos de belleza que se usan para determinar si se debe continuar usándolos o no.

Calmando la piel sensible
El objetivo de los productos para la piel sensible es calmarla y restaurar el balance natural además de protegerla como a cualquier tipo de piel.

Estos son algunos consejos para cuidar la piel sensible:

- Usa un limpiador suave para piel sensible. Las limpiadoras normales pueden irritar la piel.

- Evita exfoliar con frecuencia y solo usa exfoliantes con acido o encimas evita los gránulos.

- Usa agua templada o tibia nunca caliente o fría.

- Evita los tónicos o astringentes con alcohol.

- Usa humectante para tus necesidades o para calmar la piel. Si el humectante causa enrojecimiento o ardor descontinúalo por lo menos hasta que la piel se normalice un poco, entonces puedes empezar a usarlo cada otro día si ese humectante es necesario para tu rostro (puede ser una crema anti arrugas o algo similar)

- Usa protector solar. Todas las pieles lo necesitan pero la piel sensitiva lo necesita aun más. Entre más irritada esta la piel más fácilmente se daña con el sol.

- En la naturaleza encontramos hierbas como la manzanilla que ayudan a calmar la piel. Se puede usar té de manzanilla como tónico o en mascarillas. También puede tomarse si no hay alergias a esta hierba.

- La sábila ayuda a calmar la piel y a normalizarla. Se puede usar el gel de la sábila como mascarilla.

- Se pueden tomar suplementos de aceite de bacalao, salmón, aceite de linaza, tomar agua de chía u otro aceite Omega 3 para ayudar a calmar la piel.

- La alimentación es muy importante para normalizar la piel. Se deben de evitar los alimentos pre-preparados normales (por su abundancia de sal y otros aditivos), la manteca y otras grasas hidrogenadas, el exceso de: Azúcar, alcohol, café, sodas de dieta y normales y alimentos picantes.

Al hacerte faciales indícale a la esteticista que tu piel es sensible para que seleccione los productos de acuerdo a esto y tenga sumo cuidado durante la extracción.