La hidratación es escencial para retardar los signos de envejecimiento y la clave para lucir una piel más joven y saludable.

La piel contiene 70 por ciento de agua y un 13 por ciento de capa córnea, que es la superficie. Cuando está por debajo de estos porcentajes, se debilita y deteriora. La exposición al sol, al aire y la contaminación, el consumo de tabaco y la falta de vitaminas y minerales, hacen que se seque y provoque arrugas prematuras, flácidez y opacidad. Por eso es importante mantener el agua necesaria en nuestra piel mediante una alimentación balanceada y la aplicación de productos y rituales que la hidraten.

ROMPER EL MITO

Es cierto que las pieles secas y sensibles son mucho más propensas a deshidratarse, sin embargo las pieles mixtas y grasas también necesitan productos hidratantes o remedios caseros que les ayuden a mantener su humedad natural. La mayoría de ellas sufren en forma constante de la agresión de limpiadores o jabones muy fuertes que alteran su pH, con 10 que la piel se reseca y obtiene una apariencia poco saludable. Existe una gran variedad de cremas, sueros y tónicos con agentes antioxidantes y anti-irritantes diseñados especialmente para hidratar este tipo de pieles, pero no se debe abusar de ellos ya que se pueden formar células muertas en el cutis o bien éste puede perder su capacidad de auto-recuperarse.

Por otro lado, también es común que las mujeres tengan un poco de cada tipo de cutis en distintas épocas del año, por 10 tanto se recomienda cambiar de productos dependiendo de la condición en la que tu piel se encuentre.

Signos de deshidratación:

- piel seca o escamosa
- acumulación excesiva de células muertas
- falta de elasticidad y flexibilidad
- flacidez
- irritación
- comezón
- tono de piel desigual

AL RESCATE

Los factores que provocan la deshidratación son tanto externos, asociados a las perdidas hídricas, como internos, debido a la incapacidad para retener el agua suficiente. Sin embargo, existen varias cosas que puedes hacer para ayudar a tu piel.