Las estrías no producen dolor pero suelen ser muy molestas estéticamente. 

Como por lo general se ensañan con zonas de nuestro cuerpo sumamente erógenas como muslos, caderas, mamas y abdomen, es perfectamente comprensible que la mujer que las padece sienta algo de vergüenza o incomodidad a la hora de lucir la desnudez frente a un hombre.
A pesar de esta poderosa sensación de invalidez, no todo está perdido.   

 La ciencia está de nuestro lado y, hoy en día, aunque se trate de casos muy notorios o severos, con los nuevos aparatos para combatir las estrías no existen razones para resignarse a convivir de por vida con estas marcas indeseables.

Tratamiento a base de Acido Retinoico: Produce la estimulación de los fibroblastos, que son los generadores de colágeno, mejorando las estrías qué aparecen en abdomen, glúteos y busto.

Es sumamente eficaz si se aplica en forma de emulsión después de la ducha, cuando la piel está húmeda, de modo de producir una penetración profunda.

Luego se complementa con un producto hidratante si se siente la piel tirante. Se realiza en casa con un control médico semanal durante tres meses.

Durante las tres primeras semanas de tratamiento la piel puede inflamarse e irritarse. Por eso es conveniente usar ropa interior de algodón y bañarse con un jabón neutro cremoso, sin desodorante.