Hace unos días hablábamos de que este verano está de moda pintarse los ojos en dorado o amarillo, 2 tendencias similares que se distinguen entre sí por el brillo transparente que desprende la primera, frente a la opacidad mate de la segunda. Hoy retomamos el aspecto brillante que te ofrece el estilo golden y lo veremos aplicado también al plateado, donde toma un fuerte efecto metalizado.

Como si de auténtico mercurio se tratara, las sombras grises de este año vienen arrasando con todo por donde pasan. El párpado se impregna en su totalidad llegando por completo hasta el nacimiento de la ceja e incluso, cubriéndola también en algunos casos. La línea inferior del ojo también se ve adornada por un difuminado plata, así como el lagrimal y la cara interna del entrecejo. Este año, trabajar con polvo gris te permitirá dejar que tus pestañas también se vean tocadas por él, sin necesidad de que lo disimules posteriormente con el rímel.




La tendencia total y absoluta para pintarse los ojos en plateado también te deja jugar con tonalidades más oscuras de la gama que podrás lucir a solas o verlas combinadas con el clásico negro efecto ahumado. En cualquier caso, el brillo metálico ha de ser el protagonista, así es cómo distinguirás esta técnica de la tradicional para pintarse los ojos de gris. Por aquel entonces veíamos por igual texturas acabadas en mate o en brillo. Este año el mate desaparece y se impone el metal.



Una imposición que se destaca de un modo más exagerado en la última fotografía. En ella puedes ver las apuestas más atrevidas que se han realizado con la técnica glitter. El plateado da cobertura total al párpado hasta el punto de ocultar la ceja, ya sea pintándola con la misma sombra o decorándola con papel de aluminio. Habrá que ver si esta imagen queda en tendencia de pasarela o si tendrá buena acogida entre el público en la calle.