Cuando nos vamos a maquillar, debemos preparar nuestra piel con antelación, en principio tenemos que conocer nuestro rostro, saber si nuestra piel es normal, seca o grasa, para adquirir los cosméticos más convenientes según el tipo de piel. Nuestra piel puede ser:

- Sensible: se irrita fácilmente, es seca en los pómulos, con aspecto quebradizo y a veces con arrugas, es característica de las mujeres mayores de 30 años.

- Grasa: tiene mucho brillo, presenta problemas de acné, es característica de las mujeres de 13 a 20 años.

- Mixta: es una combinación de la sensible y grasa, con sensibilidad en los pómulos y brillo en la frente, nariz y barbilla (llamada zona T)

- Normal: debido a que los cambios hormonales, son los responsables de la alteración de la tez del rostro, las pieles normales son muy escasas, éstas no se encuentran en ninguna de las categorías anteriores.

Luego de identificar el tipo de piel que tenemos, elegimos una crema limpiadora adecuada. Para una piel sensible o normal es preferible una crema limpiadora a base de pepinos, para piel grasa o mixta, una crema espumosa con exfoliante para remover células muertas, un baño con agua tibia para abrir los poros, finalmente se coloca una loción astringente con un algodón, las pieles sensible deberían evitar este paso y elegir una loción sin alcohol y por último colocar una crema humectante o hidratante con protector solar y la piel estará lista para recibir el maquillaje. En este tratamiento debemos incluir el cuelo.

La piel está lista para recibir el maquillaje:

1º aplicamos la base líquida (de larga duración para evitar retocarla) si la piel es grasa o mixta y en crema o panstick si la piel es sensible.

2º. Elegimos una base un tono más claro que el color de nuestra tez, para poder cubrir las zonas en las que queremos disimular algún granito u ojeras y la aplicamos con una esponjita empezando por la frente, nariz, mejillas y barbilla, terminando en el cuello de forma pareja.

3º. Mientras esperamos que se seque la base continuamos con los ojos, reconociendo si son grandes o pequeños. Son grandes cuando se puede ver 1cm del párpado sino son pequeños.

4º Aplicamos la sombra en la zona del párpado hasta donde empieza el hueso que rodea al ojo, del mismo color de la prenda que se quiera resaltar. Los colores oscuros como el marrón, gris o café son para la noche y pieles oscuras , los brillantes como fucsia, azul metalizado y verde limón para el día y peles blancas, aunque todo depende del vestuario que se quiere resaltar. Para borrar algún desperfecto se hace con una brochita limpia de las que usamos para el rubor.

5º Definimos las cejas con sombra café, eligiendo el tono según el color del cabello, si es rubio con café claro, si es cabello oscuro elegimos marrón, evitamos usar el color negro para que no queden marcadas y tampoco lápiz porque no se difuman y dejan excesos.

6º Trazar las líneas de ojos con lápiz de color o líquido de color negro, azul, café o verde según la combinación con la sombra, en la parte superior e inferior de las pestañas. Si el ojo es pequeño no es aconsejable no aplicar en el párpado superior si no se quiere resaltar el delineador. Si el maquillaje es para todos los días, este paso puede obviarse porque además de llevar bastante tiempo, hace lucir muy bien arreglada y deja de ser un maquillaje sencillo para lucirlo a diario.

7º Aplicamos el maquillaje de pestañas desde la raíz hacia las puntas, a pesar de que el color más usado es el negro se puede usar café o azul y luego arquearlas con el arqueador de pestañas, pero si no lo tenemos, lo podemos hacer con una cuchara, (sostenemos la parte ovalada con el dedo índice y el pulgar encima de las pestañas haciendo un movimiento curvo hacia fuera)

8º El lápiz labial debe combinar con la sombra y según la necesidad de vernos, por ejemplo, si queremos vernos llamativas vamos a usar un rojo oscuro, en cambio si necesitamos estar elegantes usaremos un vinotinto, si se trata de vernos divertidas: un fucsia o rojo intenso, enigmáticas: un color café y para vernos sexy: el rojo clásico. Se aplica en el labio inferior, se cierra y abre la boca para que se esparza en ambos labios, retocamos los bordes y aplicamos brillo labial, para matizar se puede aplicar un color plateado o dorado antes del brillo, tiene que ser similar a la sombra, si la sombra es dorada el matizante también dorado, podemos ahorrar comprando labiales metalizados. Si la boca es grande no se debería usar brillo, para reducir los labio se aplica base en la boca y labial en el interior de la línea de los labios. También se puede usar un lápiz del mismo color que el labial para contornear los labios