Cuantas veces nos preparamos con nuestra mejor vestimenta, el maquillaje perfecto y a la hora de elegir los accesorios al llegar a los pendientes comienza nuestro problema, elegimos el que más combina para la ocasión, los colocamos, la primera impresión nos dice que va a estar todo bien, salimos, llegamos al evento donde nos esperan y ahí es cuando empieza el problema, una repentina picazón que con el tiempo se convierte insoportable hasta el hecho de quitarnos los pendientes y guardarlos en nuestro bolso o bolsillo si es que tenemos en ese momento.

En esta oportunidad desde Bellavlog, en esta oportunidad vamos a compartir algunos secretos para poder lucir sin ninguna clase de inconvenientes los pendientes que más nos gustan además de comprender la razón por la que tanto nos molestan.

En principio la razón se debe a la intolerancia hacia ciertos metales como el níquel, cobalto o duralio, componentes de la mayoría de los pendientes, que causan alergia ya que penetran en la piel originando la característica picazón, enrojecimiento y hasta algunas veces pus, pero si verdaderamente las mujeres son alérgicas a estos metales sufrirán el mismo problema al querer usar cualquier otro accesorio como collares o pulseras.

En principio habría que evitar o dejar de usar bijouterie que contenga estos materiales especialmente níquel, que es el más perjudicial y usar en cambio los pendientes y joyas de oro amarillo y plata que reducen la posibilidad de que se presente algún tipo de alergia.

Pero muchas veces, nos sucede que ningún pendiente nos gusta más que aquel que nos hace daño, entonces si es que estamos atravesando por esa circunstancia existe una solución:

Pintar con esmalte transparente la zona del pendiente que estará en contacto con la piel del lóbulo de la oreja.

Si se trata de quitar la irritación y la picazón, humedecer un algodón en una infusión fría de romero, malva o laurel.

Si la piel se encuentra agrietada y muy seca puede solucionarse simplemente con una crema hidratante.