A la gran mayoría de las mujeres les encanta llevar el pelo suelto, pero para eso hay que mostrarla sano, sino queda muy descuidado de su parte. Pero hay momentos en que el pelo no se ve bien y debemos repararlo para que no quedemos desalineadas.

Por suerte existe una posibilidad de curación de esas puntas dañadas y así evitar el corte de pelo radical. Muchas veces las cusas de esos daños puede ser la exposición excesiva en el sol, el desgaste al estar en el mar, y todo lo que el cabello se debe enfrentar a lo largo del día desde las inclemencias del tiempo a la basura que corre en el aire.

Si bien en el mercado hay algunas marcas que se dedican justamente a reparar el pelo dañado, quizás estás buscando algo más natural y por suerte las recetas caseras existen para estos casos.

Por ejemplo el aceite de almendras es uno de los reparadores para ese tipo de casos. Una vez que te hayas lavado tu cabellera tienes que aplicártelo en las puntas. De esta forma se curarán esos daños en ese sector Tienes que frotar las puntas de manera sutil con el aceite y dejar que solo se seque. Luego te peinas como haces siempre. Lo que se logra con ese aceite es recobrar la vida de tus puntas.

Otra de las opciones que existen para este fin y que también te ayudará a la salud de toda tu cabellera es mezclar una yema de huevo con cinco gotas de juego de limón y aceite de almendras. Te lo aplicas sólo en las puntas y los largos del cabello, evitando el cuero cabelludo. Te lo pones antes de dormir y luego te colocas un gorro para que haga efecto la mezcla y al día siguiente te lo lavas. Lo debes hacer por una semana y los buenos resultados saldrán a la luz.

Otra de las variantes de la anterior receta es hacerla con yema de huevo y mezclarla con aceite de oliva. Tienes que hacerlo dos veces a la semana y dejar actuar la mezcla por 30 minutos con una bolsa de nylon en la cabeza.